En Canarias tenemos ventajas añadidas para desarrollar el enoturismo, pero necesitamos construir una oferta de calidad

El enoturismo ya es uno de los segmentos más atractivos que relacionan el sector vitivinícola y la actividad turística en Canarias, pero falta que se definan estrategias para su desarrollo en el archipiélago, ha afirmado Gabriel Santos García, consultor y subdirector de la Cátedra de Agroturismo y Enoturismo de Canarias del Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria y de la Universidad de La Laguna. 

La falta de creatividad y diversificación en el enoturismo parece algo común en diferentes regiones vitivinícolas a nivel mundial, Santos ha explicado que puede sonar a tópico, pero las personas que está o quiere desarrollar el enoturismo es la que tiene que ser más creativa. Como en cualquier sector, es fundamental utilizar todas las herramientas que se han convertido en obligatorias cuando se trata de tener un negocio que busca atraer a personas, a cogerlas y proporcionarles una experiencia, y se trata de individuos con diferentes criterios, grados de experiencia y conocimientos, y ambiciones muy concretas.

También será importante diversificar y flexibilizar la oferta, complementar el enoturismo como un aglomerado de recursos y no sólo como algo propio de una bodega, y esto requiere trabajar en equipo con otros actores locales para aumentar el alcance de la experiencia más allá de las fronteras de cada uno. 

Mantener, promocionar y comunicar lo que es único y genuino, contando un “relato” de forma natural y atractiva utilizando todos los elementos que sean realmente útiles y sabiendo adaptarse a los diferentes estilos de los enoturistas. Aceptar que nuestro cliente quiere busca una experiencia emocional, sensorial, inolvidable y con capacidad de recordar durante muchos años. 

En este sentido, Gabriel Santos añade que hay que lograr una relación más cercana con los visitantes, más allá de la simple cata de vinos. Siempre es importante observar lo que hacen los demás y saber sacar nuestras propias conclusiones, para saber adaptarnos, y entender el tamaño correcto de nuestra oferta. 

Enoturismo en Canarias

Son varias las regiones que ya han identificado la actividad enoturística como una estratégica para acercar visitantes y asentarse como destinos turísticos, incorporando financiación por las propias administraciones sin contemplaciones. Pero en nuestro caso, las Islas Canarias ya es un destino consolidado internacionalmente con una diversificada oferta, pero el turismo del vino o gastronómico, sigue sin contar con una estructura significativa para la oferta, “y sin producto no hay oferta, por lo tanto no hay promoción”. Aunque se alude como reclamo al territorio y paisaje agrario para cautivar con su atrayente y característica belleza al turista en muchos aspectos de las campañas de promoción del archipiélago a nivel nacional e internacional. 

Es importante pensar en estrategias conjuntas que aúnen las áreas regionales donde se desenvuelve el enoturismo, turismo y agricultura. En Canarias tenemos ventajas añadidas porque somos ocho islas diversas, y nuestro tamaño como región y marca ayuda, pero necesitamos construir la oferta e implementarla con financiación al sector empresarial, para asegurarnos de que llegue a los miles de turistas que ya nos visitan. Esto requiere de compromiso, esfuerzo y profesionales. 

En este sentido la Cátedra de Agroturismo y Enoturismo de Canarias, cumple este año 5 años de su fundación. Acercándose a su aniversario y con la consolidación propia del tiempo que va transcurriendo, la Cátedra ha decidido crear el primer Curso de Especialista Internacional en Innovación y Gestión del Enoturismo Sostenible con el fin de formar profesionales con objetivos de sostenibilidad, proporcionando una visión general de las posibilidades de desarrollar la actividad enoturística, y así contar con un capital humano que sea capaz de coadyuvar articular el desarrollo del enoturismo en las Islas Canarias.